El Fantástico de Julio

Una vez que nos empezamos a arreglar para salir por la noche, un personaje empezó a entrar en nuestras vidas. Su nombre era Julio, quedamos con él en que después de cenar hablaríamos. Finamente se nos había encalomao con “su novia”.


Pues sí, en vez de barbacoa de nuevo nos fuimos al bar de al lao. Menuda hamburguesa..... aquello que llevaba no era pan, era mala leche. Y ahora tocaba decidir q hacer....... botellona en el camping?, botellona en medio de la carretera y después carpa?..... El comienzo no fue muy bueno, pues teníamos el problema del coche, quien lo cogería? Quien sería el valiente que se sacrificaría por el resto?? Ahí llegarón los problemas entre el mayor de los Ramírez y la mediana, al final el tocó a Carlos, la verdad es que nos cortó algo el punto. Si nosotros somos buenas personas y no vamos a chocarnos con nadie.... por una copita de mas que va a pasar..... y eso que el otro coche lo llevaba mi pishón.

Mientras tanto un tal Julio intentaba entrar nuestras vidas, acompañado de “su amiga” Sonia. Menudo flipado y busca vidas. Empezó a deleitarnos con sus batallitas. “a verdad es que me da vergüenza contarlo y Sonia no lo sabe. Resulta que no había sitio en ningún camping y le he tenido que decir al hombre que soy Guardia Civil y me han buscao un huequecito”. Por otro lado resulta que tenía que sacar el coche del camping y eran mas de las 12h, que como lo hizo.... pues le dijo al guardia que lo habían llamao de Zahara de los Atunes el Sargento o que se yo quien diría. Después se llevó toda la noche contando batallitas de cuando estuvo en el País Vasco, de cuando estuvo en San Fernando. El tío no paraba de hablar. Yo al principio dudé de si era guardia civil y todo. No se era muy extrovertido y fantástico. Pero va a ser que al final lo era y todo. Pues hubo un momento en que uno de la carpa lo reconoció. “Villamaña!!”. A todo esto su acompañante había momentos en que era ignorada por nuestro amigo, era gracioso, él hablaba y ella, allí mirando pensando: “Si yo sólo venía a echar un polvo”.

Pues nada sobre las 4 nos fuimos pa la magnífica carpa, maldito momento aquel, nada bueno allí hicimos. Aquello estaba lleno de flipaos de Los Caños de Meca y alrededores, después de un rato aparcamos, gracias a Dios que el coche quedó intacto, pues los baches eran curiosos. Después nos introducimos en el lugar de la música. Nada más entrar ponía: Prohibido consumir drogas. Titiriti titiri, po que buen sitio no?, así que duramos como media hora o poco mas y nos fuimos pal sobre. Lo único bueno del sitio es que ra muy chulo, era como un bosque, de hecho se llamaba El Jardín del Eden. A to esto nuestro intrépido amigo seguía con nosotros, aunque como se acercaba la hora del polvino, más pegado a su presa. Y yo me preguntaba, vamos a ver, son las 4 de la mañana y a las 10:30 deben estar en planta, pa cuando van a dejar la penetración??. A lo mejor es que soy mu mal pensao y realmente sólo eran amigos sin derecho a roce. Pruebas no tenemos, sólo a la pequeña de los Ramírez que dice que escuchó gemidos en la oscuridad, jajaj.